En Santander, el 6 de noviembre, un interesante suceso tuvo lugar que nos recuerda la importancia de la vigilancia y la iniciativa ciudadana en la lucha contra la delincuencia. Un agente de la Policía Nacional, que se encontraba fuera de servicio, actuó de manera heroica al interceptar a un hombre de 45 años que había huido en patinete tras cometer un hurto en un centro comercial de El Alisal.

Los acontecimientos se desenvolvieron el pasado 11 de octubre, cuando el agente, que disfrutaba de su tiempo libre cerca de un establecimiento comercial, observó a un hombre salir a toda velocidad de una tienda. Este individuo, que manejaba un patinete, ignoró los gritos de una empleada que le instaba a detenerse, tras haber supuestamente sustraído varios artículos de la tienda.

El policía, sin dudarlo, decidió comenzar la persecución en el momento en que el hombre dio inicio a su fuga. A pesar de las barreras del tráfico, que incluían frenadas bruscas de varios vehículos, el sospechoso continuó su carrera, desoyendo las órdenes del agente, quien intentaba hacerle entender la gravedad de su acción.

Finalmente, gracias a la determinación del agente, el fugitivo fue interceptado. Al realizar una inspección, se comprobó que el hombre llevaba en su patinete varios productos de considerable peso, además de haber escondido más artículos en una mochila que portaba consigo.

El agente inmediatamente contactó con el Centro Inteligente de Mando Comunicación y Control 091 (CIMACC-091), lo que llevó al despliegue de una dotación policial en la escena. Posteriormente, se verificó que los productos hurtados, valorados en 540 euros, provenían de dos establecimientos distintos, lo que subrayó la gravedad de la situación.

El hombre, que ya tenía antecedentes delictivos, fue detenido y puesto a disposición judicial, acusado de ser el presunto autor de un delito de hurto. Este incidente pone de manifiesto la necesaria colaboración entre ciudadanos y fuerzas del orden en la erradicación de delitos, así como la valiosa labor que realizan quienes están comprometidos con la seguridad de la comunidad, incluso fuera de su horario laboral.