El pasado sábado, un hombre de 43 años fue arrestado por la Policía Local de Santander en medio de las celebraciones de San Fermín, tras negarse a realizar una prueba de alcoholemia y enfrentarse a los agentes en un incidente que pudo haber puesto en riesgo la seguridad de los viandantes.

El altercado tuvo lugar alrededor de las dos de la mañana, cuando los policías notaron que un automóvil circulaba de manera temeraria por la calle Tetuán, donde la fiesta congregaba a numerosos asistentes. Al percatarse de la presencia policial, el conductor frenó de manera abrupta, lo que llevó a que su vehículo derrapara y casi colisionara con personas que se encontraban en la zona.

Ante esta situación, los agentes le solicitaron que detuviera el coche en una rotonda cercana, pero el individuo ignoró la orden y estacionó en el lado derecho de la calle, intentando huir junto a una mujer que lo acompañaba.

Cuando los efectivos lograron alcanzarlo, solicitaron que se sometiera a las pruebas necesarias para determinar su estado, a lo que él reaccionó de forma agresiva, cerrando los puños y lanzando puñetazos, mientras su compañera incitaba a la multitud contra los policías.

Debido a su resistencia y la tensión creada en el lugar, los agentes lo separaron de la multitud y, tras continuar su negativa, procedieron a arrestarlo. El hombre enfrenta serias acusaciones, incluyendo resistencia a la autoridad y delitos relacionados con la seguridad vial, tales como la negativa a la prueba de alcohol y la supuesta conducción bajo los efectos del alcohol.

El vehículo involucrado en el incidente fue trasladado por una grúa municipal al depósito correspondiente, marcando el fin de una noche que, a pesar de haber empezado con celebraciones, terminó de manera conflictiva por la irresponsabilidad de un individuo.