La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha manifestado que la situación de los pélets en las playas de la comunidad "está estabilizada", aunque apuesta por "ser cautos" y seguir vigilando su posible aparición "de forma exhaustiva".

A pesar de que la situación en alta mar es incierta, las previsiones indican que el escenario respecto al vertido de microplásticos no empeorará en los próximos días. Gracias a las condiciones de viento y las corrientes marinas, los residuos que puedan haberse alejarán de la costa.

La presidenta insiste en que no hay que bajar la guardia y que se mantendrá el operativo de limpieza y vigilancia mientras los técnicos lo consideren necesario. Aunque la repercusión en la comunidad es reducida, se están preparados con un plan de contingencia en caso de que la presencia de residuos aumente.

María José Sáenz de Buruaga ha dado a conocer el estado de la situación una semana después de la aparición de los primeros pélets en las playas cántabras. Hasta ahora, se han recogido un total de 4,3 kilos de plásticos en los 220 kilómetros de costa y las 110 playas de la región.

Desde la aparición de los primeros plásticos, el Servicio de Emergencias 112 ha recibido un total de 16 llamadas de aviso.

Según la presidenta, la situación se mantiene igual, con una presencia de plásticos muy poco significativa y dispersa en las playas. El dispositivo de limpieza continúa trabajando en distintas playas de la región.

Actualmente, se cuenta con 35 operarios de Tragsa, 12 vehículos, un dron y varios efectivos del Servicio de Vigilancia Ambiental de Cantabria, Inspección Pesquera y Costas del Ministerio para la Transición Ecológica.

Buruaga destaca la labor de su Gobierno, que ha sido "ejemplar" y ha reaccionado rápidamente ante esta emergencia. También se mantendrá la coordinación con otras comunidades y los técnicos para tomar decisiones.