La Consejería de Salud del Gobierno de Cantabria ha señalado que la onda de COVID-19 puede haber alcanzado su punto máximo y comenzará a retroceder en las próximas semanas. Recomiendan encarecidamente el uso de mascarilla a aquellos que presenten síntomas catarrales o gripales, así como el lavado frecuente de manos.

En un audio enviado a los medios, el consejero de Salud, César Pascual, hizo un llamamiento a la prudencia durante el último fin de semana navideño, debido a las bajas temperaturas y las reuniones familiares propias de la festividad de Reyes. Según los datos recopilados por el Gobierno, se observan los primeros indicios de que la onda del virus podría estar alcanzando su punto máximo y comenzando a retroceder en las próximas semanas.

Pascual destacó que la incidencia a siete días se sitúa en 309, con una tendencia a la baja, y los casos atendidos en Atención Primaria, tanto diarios como semanales, también indican que la onda está comenzando su retroceso. Sin embargo, advirtió que las urgencias aún están "muy saturadas", a pesar de que la presión asistencial está disminuyendo.

El consejero subrayó la importancia de seguir aplicando medidas preventivas durante estos días, como el uso de mascarilla en caso de presentar síntomas, el lavado de manos y la vacunación.