En Santander, la Policía Local ha investigado a un conductor de 27 años que tenía el permiso suspendido y circulaba de manera errática con el teléfono móvil en la mano, además de dar positivo en alcoholemia.

Los agentes de Movilidad alertaron a la Policía Local al observar el domingo por la mañana a un vehículo circulando de forma peligrosa por la calle Severiano Ballesteros.

Tras solicitar la documentación al conductor e identificarlo, descubrieron que tenía una suspensión temporal del permiso de conducción dictada por el Juzgado de lo Penal Nº 3 de Burgos. Por lo tanto, se iniciaron diligencias judiciales contra el joven, en calidad de investigado no detenido, por presunto delito contra la seguridad vial.

Además, se le pidió que realizara la prueba de alcoholemia, la cual resultó positiva, lo que resultó en una denuncia en su contra. El vehículo fue remolcado por una grúa urbana al depósito municipal de Ojaiz.

En otro incidente, alrededor de las 23.20 horas del domingo, un vehículo se salió de la vía en la calle Hermanos Calderón, cruzando la acera y adentrándose en una zona de arbustos, sin causar daños más allá de los materiales en el vehículo.

El conductor, de 19 años, tenía el doble de la tasa permitida de alcoholemia, por lo que se han iniciado diligencias en su contra en calidad de investigado no detenido por presunto delito contra la seguridad vial.

Por último, durante el fin de semana pasado, miembros de la Policía de Santander identificaron y denunciaron a los dueños de siete locales de hostelería en varias calles de la ciudad, principalmente por exceso de ruido, molestias a los vecinos y por incumplir las condiciones de su licencia.