En Santander, la Policía Local ha logrado detener a un hombre de 52 años que se sospecha está detrás de los robos con fuerza que han estado ocurriendo en comercios de diferentes zonas de la ciudad en los últimos meses, incluyendo Cazoña-Alisal y el Paseo de General Dávila. Aunque la investigación sigue en curso por parte de la Policía Nacional.

El individuo, con antecedentes previos, fue capturado en flagrancia en la madrugada del martes pasado por la Policía Local, después de robar en una panadería en la avenida de los Castros y tratar de huir. Durante la fuga, tiró la caja registradora que había robado, pero los agentes lograron recuperarla.

Según la Policía Nacional, los robos en los comercios seguían un mismo modus operandi: romper el cristal de la puerta de acceso con un objeto contundente o forzarlas con barras de hierro, todos ellos perpetrados durante la noche.

Una vez dentro del establecimiento tras forzar la puerta, el sospechoso se dedicaba a robar la caja registradora y otros productos.

Tras analizar diversos aspectos como las zonas afectadas, el horario de los robos y los objetos sustraídos, los investigadores creían que podría tratarse de un único delincuente habitual en la ciudad, aunque no descartaban la posibilidad de que actuara acompañado por otra persona con un perfil similar.

En el momento de la detención, se encontró una barra de hierro, específicamente una pieza de andamio, que supuestamente fue utilizada para romper el cristal de la puerta de la panadería.

Con esta detención y gracias a la investigación en curso por parte de la Policía Judicial, se espera dar un respiro a la creciente preocupación social causada por los robos con fuerza en los comercios.

A pesar de la detención del individuo, las autoridades no han dado por cerrada la investigación, dejando abierta la posibilidad de obtener nuevos resultados.

El sospechoso fue presentado ante el juzgado, que dictaminó su ingreso en prisión como medida cautelar.