El Consejo de Gobierno ha aprobado este martes una partida extraordinaria de 1,1 millones de euros para combatir la enfermedad hemorrágica epizoótica. Sin embargo, el decreto que regulará estas ayudas aún está pendiente del visto bueno de la asesoría jurídica para poder publicarse.

Según María Fernández, directora general de Ganadería, se pagarán 25 euros por cada res enferma y entre 700 y 1.500 euros por las que fallezcan, dependiendo de su edad y raza. El objetivo del Gobierno es que las ayudas se abonen "antes de fin de año".

La enfermedad ha afectado a todas las comarcas agrarias de Cantabria, excepto Liébana, y se ha extendido por 70 municipios. Hasta el 27 de octubre, se han contabilizado alrededor de 4.900 animales afectados y se han notificado más de 1.650 muertes, incluyendo ovinos y caprinos.

En su comparecencia, María Fernández solo ha mencionado el pago de 25 euros por cabeza de ganado afectada, pero posteriormente ha aclarado que se establecerá un baremo en el decreto para determinar la cantidad a abonar por las muertes.

Tanto el diputado del PRC, Guillermo Blanco, como la socialista Eva Salmón consideran insuficiente tanto la cuantía global de 1,1 millones de euros como el pago de 25 euros por res afectada. Blanco cree que el Gobierno podría destinar más recursos a estas ayudas con mayor celeridad. Por su parte, Belén Ceballos del PP también considera que la partida presupuestaria es escasa.

La directora general ha expresado su deseo de disponer de un presupuesto mayor para poder cubrir todos los costes y aumentar el volumen de las ayudas. Sin embargo, ha recordado que conseguir los 1,1 millones de euros ya fue una tarea difícil.

La oposición ha criticado que la Consejería no haya tomado las medidas necesarias para prevenir la propagación de la enfermedad, como suspender ferias y concentraciones ganaderas. Le han preguntado si el Gobierno cumplirá la resolución aprobada en el Parlamento que insta a modificar la legislación para permitir a la Consejería prohibir estos eventos por motivos de sanidad animal.

La directora general ha afirmado que las medidas adoptadas se han basado en criterios técnicos y no políticos, en función del nivel de riesgo y los acuerdos alcanzados entre el Ministerio y las comunidades autónomas. Además, ha recordado que actualmente no hay una vacuna autorizada en la UE contra esta enfermedad.

La comisión ha concluido con cierta polémica, ya que los grupos de la oposición han criticado que la directora de Ganadería haya reservado parte de la información sobre el brote en Cantabria para su segunda intervención, cuando los grupos ya no tenían posibilidad de hacer preguntas.