El 17 de octubre en Santander, una notable iniciativa conocida como ‘El Reto de la Caja’, impulsada por los magos Xuso y Asier Moon, ha logrado recaudar más de 18.000 euros destinados íntegramente a la investigación del cáncer infantil en el Instituto de Investigación Sanitaria Valdecilla (IDIVAL).

Este evento solidario se llevó a cabo en la Plaza del Ayuntamiento, donde los magos estuvieron encerrados en una caja semitransparente durante nueve días, del 27 de septiembre al 5 de octubre. Este acto simbólico busca reflejar el aislamiento que enfrentan muchos niños durante sus tratamientos oncológicos, promoviendo así una mayor empatía en la sociedad.

La recaudación fue entregada en una emotiva ceremonia en el IDIVAL, que contó con la presencia del director gerente del instituto, Galo Peralta, y la doctora Mónica López, especialista en Hematología Pediátrica en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. Durante el evento, Peralta manifestó su "profundo agradecimiento" a los magos por su creatividad y dedicación a la causa social.

Según Peralta, ‘El Reto de la Caja’ representa un ejemplo brillante de cómo la imaginación y la solidaridad pueden unir a una comunidad en torno a una causa tan crucial como es la investigación contra el cáncer infantil. Además, enfatizó la importancia educacional y social del proyecto, que no solo ha aportado fondos, sino que también ha visibilizado problemáticas complementarias como la inclusión de personas con discapacidad y la adopción de mascotas.

Los organizadores, por su parte, resaltaron la emotionalidad y el impacto trascendental del proyecto, cuyo propósito inicial era visibilizar la realidad hospitalaria de los pacientes infantiles. "Logramos que una niña, llamada Irene, entrara en la caja y rompiera el estigma asociado, mostrando a la comunidad la verdadera experiencia de muchos pequeños en Valdecilla y otros hospitales de España", comentaron.

El objetivo de esta iniciativa va más allá de la recaudación de fondos: busca normalizar la percepción hacia los niños en tratamientos oncológicos. "Son niños que desean jugar y vivir, a pesar de enfrentarse a una dura batalla contra el cáncer. Si ven a un niño sin cabello, no deberían voltear por su condición; siguen siendo niños", explicaron los magos.

Pese a las proyecciones iniciales, los ilusionistas expresaron su sorpresa y satisfacción por haber recaudado más de 18.000 euros. "Desde el principio, nuestra intención fue ser completamente transparentes. Por ello, implementamos un bote virtual que mostraba la recaudación en tiempo real, actualizándose cada dos horas", añadieron.

“La caja nos incluye a todos: los voluntarios, los niños, los donantes, y cada persona que aportó su granito de arena. Transformamos esto en un movimiento social que ha unido a toda Santander”, manifestaron los organizadores.

Durante los días del evento, se llevaron a cabo varias actividades paralelas solidarias, incluyendo colectas de cabello para la fabricación de pelucas oncológicas, donaciones de sangre que resultaron en 14 nuevos donantes, y la recogida de más de 500 kilos de alimentos para el Banco de Alimentos Infantiles, además de exhibiciones de deportes adaptados y desfiles para la adopción de mascotas.

Anunciando el éxito de esta primera edición, los organizadores ya están trabajando en ‘La Caja 2’, asegurando que el proyecto ha sido registrado y patentado para prevenir su uso indebido. “Queremos que esta iniciativa continúe siendo un símbolo de transparencia y esperanza, siempre en apoyo de causas solidarias”, afirmaron con optimismo.

En conclusión, este reto ha logrado mucho más que una simple recaudación de fondos; ha despertado la conciencia colectiva, provocado conversaciones necesarias y ha iluminado una realidad frecuentemente ignorada. "La semilla está sembrada, y nuestra misión es seguir nutriéndola, porque enfrentar la realidad del cáncer infantil es el primer paso para superarlo”, concluyeron los magos con fervor.