Un escándalo ha sacudido al Ayuntamiento de San Miguel de Aguayo, donde el exconcejal Vicente Morales ha admitido haber extraído combustible del surtidor municipal. Morales, perteneciente al PSOE, aceptó una pena de tres años de prisión y tres de inhabilitación para ejercer cargos públicos, además de pagar una multa de 160 euros por malversación de fondos públicos.

La confesión del exconcejal se produjo durante el juicio celebrado en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Cantabria. El acuerdo entre la Fiscalía y la defensa evitó la necesidad de convocar un jurado popular, al restituir Morales el combustible sustraído antes de que finalizara la instrucción del caso.

Según el relato de hechos, Morales, que fue elegido concejal en 2019 y contratado como peón agrícola meses después, utilizó su vehículo personal para llenar el depósito y cuatro garrafas de gasoil del surtidor destinado a los vehículos municipales, con el objetivo de obtener un beneficio injusto.