La defensa del hombre condenado a 23 años de prisión por matar a su madre de casi 80 años en Santander ha presentado un recurso para que se reduzca la pena y se dicte otra sentencia sin la circunstancia de ensañamiento. La defensa argumenta que el asesinato se debió a una "reacción patológica" de su "problema claro de salud mental" y "no fue deliberado". El condenado, Rafael L. se ha declarado "inocente" y ha dicho que en el momento del asesinato "no era yo", que se "arrepiente" y que "no quería matar" a su madre.
La defensa solicita una nueva sentencia sin la circunstancia de ensañamiento, y que se declare la exención de responsabilidad, alegando que se da la eximente plena de anomalía psíquica. Si no prospera esta petición, la defensa solicita, subsidiariamente, que se le considere autor de un delito de asesinato sin que concurra el ensañamiento y que se le reconozca la eximente incompleta de alteración psíquica, de modo que la pena sea de siete años y medio de prisión.
La Fiscalía y la acusación particular se han mostrado en desacuerdo y han insistido en que se desestime el recurso y se confirme la condena, basándose en las declaraciones de los forenses que participaron en el juicio. Han señalado que Rafael L. relató lo ocurrido "de manera detallada" diciendo lo que había pensado en aquel momento: "te voy a destrozar". Además, en base a las evaluaciones psiquiátricas de los forenses, han defendido que "no hay relación causal alguna" de que los hechos se produjesen por un brote psicótico.
El abogado defensor ha pedido que se valore el informe de un "prestigioso" psiquiatra como Jesús Artal, que consideraba el trastorno del condenado como "grave" y que afectaba a sus capacidades cognitivas y volitivas, pero el jurado hizo "caso omiso" de ese informe. El letrado de la acusación particular ha coincidido con la Fiscalía en su intención de ratificar la condena por un delito de asesinato con ensañamiento.
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.