En Santander, el pasado 12 de marzo, la Guardia Civil llevó a cabo la detención de un individuo que anteriormente trabajaba en una empresa de telefonía. El motivo de la detención fue la contratación de más de veinte líneas telefónicas a nombre de tres personas y dos empresas, lo que sugiere una posible trama de estafas.
El hombre, de 42 años y residente en Santillana del Mar, también adquirió dos teléfonos de alta gama usando la identidad de una de las víctimas.
Todo comenzó cuando la Guardia Civil recibió denuncias a finales de agosto del año pasado, donde se reportaba la utilización ilegal de documentación personal y empresarial para la compra de móviles.
Una de las víctimas recibió una notificación de una deuda de más de 3.000 euros por la activación de 16 líneas telefónicas y la adquisición de dos teléfonos caros.
Las investigaciones revelaron que, a pesar de los contratos estar a nombre de las víctimas, la entrega de las tarjetas SIM y los móviles se realizaba en una dirección en Santillana del Mar, ajena a ellos.
La conexión con el antiguo trabajador de la empresa de telefonía se estableció al descubrir que utilizaba su base de datos de clientes para abrir nuevas líneas sin el consentimiento de las personas afectadas.
Se ha confirmado la contratación de otras 10 líneas telefónicas, elevando el total a 26 registradas a nombre de terceros.
Hasta el momento, los afectados reportados son tres individuos y dos empresas, pero se continúa la investigación para identificar posibles estafas adicionales.
El 4 de marzo, el culpable fue localizado y detenido por delitos de falsificación de documentos, suplantación de identidad y estafa.
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