SANTANDER, 24 de julio.

El partido Alianza Verde ha decidido impugnar el plan de manejo del lobo en Cantabria, demandando que la Consejería de Desarrollo Rural detenga inmediatamente las extracciones de estos animales.

Este jueves, la formación política presentó formalmente sus alegaciones al plan, argumentando que carece de una evaluación científica objetiva y actual, llevada a cabo por organismos independientes, que justifique la implementación de medidas letales, tales como la caza de lobos.

Según Alianza Verde, la legislación europea sólo permite el control de las poblaciones de lobo en situaciones excepcionales y bajo criterios muy restrictivos, algo que, destacan, no se ha evidenciado en Cantabria, donde el enfoque perseguido parece fomentar un desequilibrio ecológico y poner en riesgo la biodiversidad. Esto, advierten, favorece la proliferación de ciervos y otros ungulados, llevando a mayores daños en la agricultura, aumento de accidentes de tráfico y riesgos de enfermedades zoonóticas.

Los críticos del gobierno regional acusan a Cantabria de haber formulado un plan que responde más a presiones políticas y demandas del sector ganadero que a una sólida base científica y a la necesaria participación de expertos en conservación.

El Ejecutivo de Cantabria optó por reactivar un plan de gestión que existía antes de que el lobo fuera excluido del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial. Este plan permite la extracción de hasta un 20% de la población de lobos, estableciendo un límite específico de 41 ejemplares para el presente año.