El Ayuntamiento de Laredo ha anunciado una serie de medidas "de urgencia" para abordar las inundaciones en el estadio Javier Cortezón, que obligaron a cerrar temporalmente la instalación por motivos de seguridad. La clausura generó controversia y críticas por parte del Club Deportivo Laredo, que denunció la falta de acción para resolver los problemas en el terreno de juego y los vestuarios.

El alcalde de Laredo, Miguel González, se reunió con el presidente del club, Josemi San Román, para abordar la situación y acordar soluciones inmediatas. Tras la reunión, se anunció la realización de mejoras en las instalaciones deportivas para permitir que todos los equipos puedan entrenar de manera adecuada.

Además de las medidas de corto plazo, se estableció un plan a medio y largo plazo para mejorar tanto el estadio Javier Cortezón como el San Lorenzo. El Ayuntamiento se comprometió a trabajar en dos grandes proyectos que impactarán directamente en el fútbol en Laredo y beneficiarán al Club Deportivo Laredo.

El alcalde y el presidente acordaron mantener reuniones periódicas para abordar las necesidades del club y aseguraron estar en constante comunicación para tratar temas de relevancia y prioridad. Ambos expresaron su pesar por la situación incómoda del domingo y pidieron disculpas a los afectados, destacando la importancia del diálogo para encontrar soluciones en beneficio de todos.