Nace la tercera camada de águilas pescadoras en la Bahía de Santander
El Osprey Centre en Santander ha realizado el bautizo de tres jóvenes águilas pescadoras, marcando un hito en la tercera generación de estas majestuosas aves en la Bahía de Santander. El anillamiento de los ejemplares, además de medir su peso y talla, tuvo lugar el pasado jueves 6 de junio en un emotivo acto que busca preservar esta especie en peligro de extinción.
En esta tercera generación, compuesta por dos hembras y un macho, se evidencia la importancia de la reproducción en el norte de la Península Ibérica. Este logro ha sido posible gracias al incansable trabajo del proyecto de recuperación del águila pescadora liderado por Carlos Sainz, director del Osprey Centre.
El proceso de anillamiento, realizado por expertos como Gonzalo Pardo de Santayana, permitirá rastrear y estudiar el comportamiento migratorio de estas águilas juveniles, ofreciendo valiosa información para su conservación a largo plazo. Las expectativas de recuperación de esta especie en peligro han aumentado en gran medida con la reproducción exitosa de la pareja Txuriko y Landa en la Bahía de Santander.
La labor de preservación de estas aves marinas es fundamental para su supervivencia, y el camino hacia la recolonización en el Cantábrico está marcado por el reclutamiento de nuevas generaciones. El llamado a la población para que participe en el bautizo de las tres águilas nacidas esta temporada refleja el compromiso del Osprey Centre en involucrar a la comunidad en la protección de la biodiversidad.
La reaparición de este emblemático ave en la Península Ibérica es motivo de celebración y de la urgente necesidad de implementar medidas de conservación para su hábitat. Con la categoría de 'Vulnerable' en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas, el águila pescadora requiere una atención especial y un enfoque integral en su protección.
Para garantizar la preservación de estas hermosas aves marinas, se hace un llamamiento a la responsabilidad de evitar acciones perturbadoras en su entorno, como la intrusión en sus nidos o el excesivo ruido de embarcaciones. La zonificación del área de cría y la regulación del tráfico marítimo son medidas clave para proteger a estas especies en peligro.
El Osprey Centre continuará su labor de vigilancia y seguimiento de la reproducción de las águilas pescadoras en la Bahía de Santander, fomentando la participación ciudadana a través de programas de voluntariado. La comunidad juega un papel crucial en la conservación de estas aves icónicas, cuya presencia en la región es un recordatorio de la importancia de proteger y respetar la biodiversidad.