CASTRO URDIALES, 28 de octubre.

Un pleno del Ayuntamiento de Castro Urdiales ha tenido que ser suspendido este martes en medio de una intensa protesta organizada por la Plataforma de Pensionistas del municipio, que exigía mejoras en el acceso al transporte público hacia los hospitales de Laredo y Valdecilla.

Mientras los concejales se encontraban inmersos en el debate, el ruido ensordecedor de una cacerolada comenzó a invadir el salón de plenos, dificultando la continuación de las intervenciones. La situación se volvió insostenible, llevando a la alcaldesa, Susana Herrán (PSOE), a abandonar el recinto durante unos minutos para dialogar con los manifestantes.

Al regresar, la alcaldesa informó que había encontrado una "total sintonía" con las demandas de los pensionistas, reconociendo que tanto su administración como las anteriores ya habían respaldado este reclamo. Sin embargo, reiteró que la competencia en esta materia no correspondía al Ayuntamiento, sino al Gobierno de Cantabria.

Inmediatamente después de estas declaraciones, el pleno fue reanudado brevemente, pero se vio obligado a interrumpirse nuevamente debido al ingreso de medio centenar de manifestantes al salón y a la persistente cacerolada que resonaba en el exterior.

Herrán se mostró abierta a la presencia de los manifestantes, siempre que su intención fuera escuchar la sesión sin interrumpirla. Sin embargo, les advirtió que las interrupciones obligarían a suspender la reunión.

Ante el continuo clamor de consignas como "Transporte y sanidad" y "Es nuestro dinero", los pensionistas exigieron a los concejales que tomaran medidas inmediatas para mejorar el transporte hacia los hospitales. La alcaldesa pidió enérgicamente un ambiente de respeto y tolerancia, advirtiendo que no iba a permitir faltas de respeto ni insultos a los representantes municipales.

A pesar de su llamado a la calma, Herrán no solicitó la intervención de la policía, apostando por que la ciudadanía pueda expresar sus inquietudes de forma respetuosa. Sin embargo, debido a la continuidad de las interrupciones, decidió finalmente suspender el pleno, que en ese momento discutía una moción del PSOE relacionada con la modernización del puerto de Castro para atender mejor las necesidades de sus usuarios.

Esta propuesta, así como otra del PRC que pedía el reacondicionamiento del centro cívico de Islares, no pudieron ser debatidas ni sometidas a votación, dejando en suspenso importantes cuestiones para el desarrollo del municipio.