El pasado 7 de noviembre, la Policía Local de Santander llevó a cabo una intervención significativa relacionada con la tenencia responsable de animales potencialmente peligrosos, al emitir una serie de denuncias contra un joven de 19 años por múltiples infracciones relacionadas con su perro, un Presa Canario.

El incidente tuvo lugar a las 21:40 horas del miércoles en la calle María Cristina, donde los agentes detectaron una serie de irregularidades que completaron un total de 13 infracciones. Entre las faltas señaladas, se incluía la omisión de recoger los excrementos del animal, lo cual refleja un desdén por las normas de convivencia y salud pública, así como la negativa a identificar su estado y proporcionar información requerida por los agentes.

Las infracciones no se detuvieron ahí; el joven era responsable de no haber vacunado al perro contra la rabia, así como de carecer de la documentación necesaria, como el carné de identificación y la cartilla sanitaria, esenciales para garantizar la salud del animal y la seguridad de la comunidad. Además, el dueño no poseía un seguro obligatorio de responsabilidad civil, un requisito fundamental en la tenencia de razas consideradas peligrosas.

La falta de registro del perro y la omisión de la inscripción en el registro municipal también fueron motivos de denuncia. Las normativas exigen que los propietarios identifiquen a sus animales y los mantengan bajo control. Sin embargo, el joven fue observado dejando a su perro suelto en la vía pública sin bozal y sin correa, evidenciando un claro incumplimiento de las medidas de seguridad necesarias para la protección de las personas y otros animales.

Como resultado de estas infracciones, el Servicio Municipal de Recogida de Animales se hizo cargo del Presa Canario, asegurando su bienestar y la seguridad de la comunidad mientras se resuelven las cuestiones legales. El joven, por su parte, enfrentó una doble denuncia, ya que también se negó en repetidas ocasiones a identificarse ante los agentes, lo que complicó aún más su situación.

Este caso pone de relieve la importancia de una tenencia responsable de animales, así como la necesidad de cumplir con las regulaciones establecidas para garantizar la seguridad y bienestar tanto de los animales como de la ciudadanía en general.