En un reciente suceso que ha captado la atención en Santander, la Policía Nacional ha procedido a la detención de una mujer de 33 años, quien es acusada de haber cometido un delito de estafa y otro de usurpación del estado civil. Se sospecha que esta persona había robado una tarjeta bancaria y el permiso de conducir de otra mujer, los cuales utilizó de manera fraudulenta. Se ishiere que utilizó la tarjeta para realizar transacciones no autorizadas y el permiso de conducir para hacerse pasar por la víctima durante un control policial, asumiendo los costos de una multa de 1.000 euros que le fue impuesta a la verdadera titular del documento.
Los hechos se remontan al 30 de agosto, cuando la víctima acudió a la Jefatura Superior de Policía para presentar una denuncia. Según su relato, aquella noche, mientras se encontraba en un local de ocio nocturno, una joven se acercó a ella para devolverle una mochila que, según decía, había tomado por error. Sin embargo, al revisar su mochila tras el incidente, la denunciante se dio cuenta de que le faltaban su permiso de conducir, una tarjeta bancaria y unos auriculares.
La situación se agravó cuando, al revisar su cuenta bancaria, la víctima descubrió que había varios cargos que no había autorizado, realizados casi inmediatamente después de la sustracción de la tarjeta. Esto la llevó a intensificar su denuncia, lo que la llevó a recibir el 13 de septiembre una notificación de la Dirección General de Tráfico por una propuesta de sanción por un monto de 1.000 euros, lo que la dejó perpleja, ya que desconocía qué vehículo o matrícula se mencionaban en la multa.
Ante la gravedad de la situación, la Policía Judicial se hizo cargo de la investigación y logró identificar a la persona denunciada por el hurto, confirmando que era efectivamente la misma que había llevado a cabo los cargos fraudulentos con la tarjeta bancaria robada. Además, las indagaciones revelaron que la sospechosa había utilizado el permiso de conducir de la víctima durante un control de tráfico, donde se le había impuesto la rueda de la multa.
Las pruebas recabadas durante la investigación han permitido a las autoridades atribuir a la detenida la presunta autoría de los delitos de estafa y usurpación del estado civil. Tras culminar el procedimiento, la mujer, quien ya contaba con antecedentes policiales, fue detenida y, aunque fue puesta en libertad, tendrá la obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando sea requerida para ello.
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