Santillana del Mar es uno de los pueblos más visitados de Cantabria, conocido por su patrimonio histórico y arquitectónico. Pasear por sus calles es transportarse a otra época, descubriendo sus monumentos y edificios históricos, disfrutando de su gastronomía y de la hospitalidad de sus gentes.
Uno de los monumentos más impresionantes de Santillana del Mar es la Colegiata de Santa Juliana, una joya del arte gótico construida en el siglo XII. En su interior se pueden apreciar las magníficas vidrieras y el espectacular retablo mayor.
Otro de los atractivos de la Colegiata de Santa Juliana es su claustro, que data del siglo XIV y está considerado uno de los más bellos y mejor conservados de España. En él se puede apreciar la influencia de la arquitectura mudéjar y gótica.
Cerca de la Colegiata se encuentra el Museo Diocesano Regina Coeli, que alberga una importante colección de arte sacro. En el museo pueden verse obras de gran valor histórico y artístico, desde manuscritos e incunables hasta pinturas y esculturas de los siglos XVI y XVII.
La Torre de Don Borja es otro de los símbolos de Santillana del Mar, construida en el siglo XV como residencia de los Duques de Infantado. En la actualidad se puede visitar y descubrir su interior, donde se encuentra una interesante exposición de objetos y utensilios antiguos.
El Barrio de la Plaza Mayor es uno de los más populares de Santillana del Mar, con sus casas señoriales, sus balcones y sus tiendas de artesanía. En esta zona es frecuente encontrar espectáculos callejeros y animación turística.
Uno de los edificios más representativos del Barrio de la Plaza Mayor es la Casa del Águila y La Parra, construida en el siglo XVIII y que alberga el Museo de la Inquisición. En su interior puede verse la exposición de instrumentos de tortura y de los procesos inquisitoriales llevados a cabo en Cantabria.
La Calle del Río es una de las más bellas de Santillana del Mar, con sus casas de piedra y sus balcones adornados con macetas. Allí se encuentra la Casa de los Hombrones, una de las construcciones más antiguas del pueblo, de estilo medieval.
Santillana del Mar es también conocida por la cercanía a la Cueva de Altamira, uno de los yacimientos arqueológicos más importantes del mundo. En la actualidad se puede visitar la réplica de la cueva, que recrea con gran fidelidad las pinturas y grabados realizados por los primeros habitantes de Cantabria.
Santillana del Mar es un destino imprescindible en cualquier viaje a Cantabria, ofreciendo al visitante una muestra del patrimonio histórico y artístico de la región. Pasear por sus calles es una experiencia única, descubriendo sus monumentos y degustando su deliciosa gastronomía. Sin duda, una visita obligada para los amantes de la historia, la cultura y la belleza.