Los sindicatos y la dirección de Bridgestone han decidido extender las negociaciones respecto al Expediente de Regulación de Empleo (ERE), fijando una nueva fecha límite para el 19 de mayo. En paralelo, se ha postergado la huelga programada para este martes, trasladándola al jueves 8, justo antes de una nueva reunión de las partes implicadas.

En un comunicado emitido tras la última sesión de diálogo, que tuvo lugar el lunes, se definieron ciertos avances comprometidos por la empresa. Bridgestone mostró disposición a reconsiderar el número de despidos y anunció un aumento en las indemnizaciones, que podrán alcanzar hasta 35 días por año trabajado, con un límite de dos años para quienes se vean afectados.

El comité de la planta de Puente San Miguel, que incluye representaciones de UGT-FICA, CCOO, BUB y SITB, aseveró que este esfuerzo de negociación ha dado sus frutos, permitiendo al mismo tiempo la reprogramación de la huelga. Luis Ruiz Eguren, presidente del mencionado comité, resaltó que las discusiones han conducido a una revisión de la postura inicial de la empresa en cuanto a los despidos.

Ruiz Eguren subrayó que Bridgestone se ha comprometido a buscar una reducción en el impacto de los despidos y ha propuesto planes de jubilación que complementen la situación de los trabajadores. Con este enfoque, la empresa está trabajando en un futuro que, aunque todavía es impreciso y no del todo satisfactorio, considera a la plantilla joven en esta reestructuración.

Además, como parte de la reconfiguración de la planta, Bridgestone ha destacado su interés en que la producción de neumáticos de alto valor añadido se mantenga en la instalación cántabra, garantizando también el suministro de compuestos. Esta decisión es vista como un paso favorable por parte de los sindicatos en la negociación.

El presidente del comité expresó optimismo respecto a los próximos encuentros, señalando que el resultado de la reunión del jueves 8 hará que el comité evalúe las próximas acciones a seguir. Ruiz Eguren enfatizó que la extensión del diálogo es aceptable siempre que exista un progreso real que favorezca a ambas partes.

La jornada de negociación se produce en un contexto de huelga generalizada, que ha alcanzado su noveno día, y coincide con una protesta frente a la Embajada de Japón en Madrid, convocada por los comités de las fábricas de Puente San Miguel y Basauri. Según los sindicatos, esto se ha complementado con reuniones con altos funcionarios, incluyendo a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y el ministro de Industria, Jordi Hereu.