En Santander, el día 31 de octubre, la Comisión de Cultura, Turismo y Deporte rechazó las enmiendas presentadas por el PRC y PSOE contra la derogación de la Ley de Memoria Histórica y Democrática de Cantabria. Con cinco votos en contra y cuatro a favor, la propuesta sigue su curso y será llevada al Pleno del Parlamento el próximo lunes 4 de noviembre.

La proposición de ley, impulsada por el partido Popular y apoyada por Vox, ha generado polémica al argumentar que la derogación es beneficiosa para Cantabria porque consideran que la ley actual no trata a todas las víctimas por igual, buscando dividir a la sociedad. Por otro lado, los partidos regionalistas y socialistas defienden la necesidad de la Ley de Memoria Histórica para la reparación de todas las víctimas y evitar que lo sucedido caiga en el olvido.

Los regionalistas presentaron cinco enmiendas, en línea con el PP, mientras que los socialistas presentaron una enmienda de supresión. En sus intervenciones, el portavoz del PRC, Pedro Hernando, expresó su descontento con la decisión de derogar la ley, considerando que Cantabria no puede prescindir de su Memoria Histórica y que la derogación significa retroceder en el olvido.

El diputado socialista Mario Iglesias resaltó la importancia de mantener viva la memoria histórica para honrar a las víctimas y asegurar que todas estén contempladas. En contraste, el diputado del PP, Íñigo Fernández, defendió la derogación total de la ley, considerándola perjudicial para la región por su parcialidad en la reparación de las distintas víctimas del pasado.

Las posturas de los diferentes partidos en la Comisión reflejan la división en cuanto a la interpretación de la Ley de Memoria Histórica y sus consecuencias. Mientras unos defienden su derogación argumentando que es necesaria para la convivencia, otros la consideran esencial para la justicia y reparación de las víctimas.