La empresa Teka ha iniciado negociaciones con el comité de empresa de la factoría de Santander para aplicar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) con una duración de un año, hasta junio de 2024. En principio, el ERTE afectaría a toda la plantilla de unas 250 personas y supondría una reducción de 32 jornadas por trabajador.
El presidente del comité de empresa, Luis Fernández, ha informado que el periodo de consultas del ERTE finalizará el próximo lunes 15 de mayo, por lo que el expediente podría presentarse la semana siguiente. Fernández ha señalado que la dirección tiene como objetivo la zona fabril, que es la más vulnerable a las fluctuaciones de la demanda.
Esta no es la primera vez que Teka recurre a un ERTE, ya lo hizo en una fábrica de Granada hace unas semanas, aunque se desconoce si se aplicará también en la factoría de Zaragoza. A pesar de la situación, Fernández ha asegurado que la plantilla no tiene previstas movilizaciones por el momento.