Una nueva paralización se ha registrado en la planta de Bridgestone en Puente San Miguel, Cantabria, marcando el noveno día de huelga en protesta por la intención de la empresa de despedir a 211 trabajadores a través de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE). Esta jornada de movilización ha sido respaldada no solo por la plantilla del turno matutino, que comenzó a las 5:45 horas, sino también por aquellos que trabajan en el turno diurno, iniciando a las 8:00 horas. Asimismo, más de un centenar de empleados se unieron a las protestas en Madrid, según ha informado el comité de empresa que agrupa a los sindicatos UGT-FICA, CCOO, BUB y SITB.

Luis Ruiz Eguren, presidente del comité de empresa de Bridgestone en la fábrica cántabra, ha subrayado la sólida unión de los trabajadores al manifestar que “una vez más, la respuesta de la plantilla ha sido contundente y ha incluido también a los empleados de las contratas, algo que hemos visto desde el inicio de estas movilizaciones contra el ERE”.

La jornada de huelga se enmarca en un contexto de negociaciones, ya que coincide con la sexta reunión sobre el ERE que afecta tanto a la planta de Puente San Miguel como a la de Basauri, en Vizcaya, programada para las 10:30 horas. Además, se ha convocado una concentración de protesta frente a la embajada de Japón, país de origen de la multinacional de neumáticos, como una forma de visibilizar las demandas de los trabajadores.

Desde la factoría cántabra, dos autocares partieron hacia Madrid a las 5:30 horas, con otro vehículo que se unió media hora más tarde llevando a más trabajadores del turno matutino en apoyo a la manifestación. Se espera que más de 300 empleados, provenientes tanto de Puente San Miguel (148) como de Basauri, se reúnan frente a la embajada japonesa, mientras que un autocar adicional llega desde la fábrica de Burgos, aumentando así la fuerza del movimiento.

Durante esta jornada crucial para la negociación del ERE, Luis Ruiz Eguren ha expresado preocupación, indicando que las posturas se encuentran “muy distantes de un posible acuerdo, ya que la empresa no ha mostrado disposición a reducir la cantidad de despidos y no ha presentado un plan industrial viable que nos dé claridad sobre el futuro más allá de 2026”.