El Gobierno de Cantabria ha vuelto a licitar la construcción del último tramo del enlace entre la S-10 y la S-30, después de que quedara desierto en su primera convocatoria. La obra, que tendrá un presupuesto de 17,3 millones de euros y un plazo de ejecución de 30 meses, discurrirá entre Morero (Guarnizo) y el intercambiador de Liaño (Villaescusa).

El departamento de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente ha reformulado el proyecto original y lo ha vuelto a licitar en la Plataforma de Contratación del Sector Público. Las empresas interesadas podrán presentar sus ofertas hasta el 10 de enero de 2024.

El consejero de Fomento, Roberto Media, ha destacado el "esfuerzo" realizado para retomar la construcción de esta obra, la cual considera "muy necesaria para impulsar la potente actividad industrial de esta zona, agilizar el tráfico pesado y facilitar la conexión entre los núcleos por los que discurren estas dos vías de alta capacidad".

El tramo a construir tiene una longitud de 650 metros y completará el nuevo eje de conexión entre las autovías S-10 y S-30. Las dos fases anteriores, el enlace de la autovía S-10 con La Cerrada-Crucero de Boo de Guarnizo y la conexión entre el Crucero de Boo de Guarnizo y el Polígono del Morero, ya están operativas.

El proyecto contempla la construcción de un viaducto sobre la ría de Solía, con una longitud total de 427 metros, y una estructura mixta de hormigón armado y acero.