La Audiencia Provincial de Cantabria ha dictado sentencia absolviento a una mujer de los cargos de corrupción de menores y abuso sexual sobre su nieta, menor de edad y en tutela del Gobierno regional. La acusación indicaba que la abuela forzaba a la joven a mantener encuentros con un conocido de la familia o a enviarle fotos desnuda durante el confinamiento a cambio de dinero.

SANTANDER, 4 Abr.

La resolución judicial destacó que no se encontraron pruebas suficientes para desvirtuar el derecho a la presunción de inocencia de la acusada, quien negó los hechos y afirmó que eran inventados por la joven.

Según el relato, la menor llegó a España en 2017 para vivir con su abuela, la pareja de esta y su tío. En febrero de 2021, la acusada solicita la baja de la chica en su instituto, ya que regresaría a su país de origen.

Posteriormente, la denunciante reveló a una educadora que un hombre, conocido de su abuela, había abusado de ella con su consentimiento, lo que llevó a que el Gobierno regional tomara su tutela. A pesar de la denuncia, la Fiscalía solicitó el archivo al no encontrar indicios de delito en la abuela.

La Audiencia decidió absolver a la acusada al considerar que no había pruebas contundentes que demostraran su culpabilidad, señalando que el testimonio de la nieta no era suficiente y presentaba contradicciones y ambigüedades.

Además, no se encontraron transferencias de dinero ni evidencia fotográfica que respaldaran las acusaciones, y la psicóloga que atendió a la joven indicó que nunca mencionó situaciones de violencia sexual.

En resumen, la Audiencia considera que el informe de la psicóloga es esclarecedor al detallar el maltrato sufrido por la menor, su temor a regresar a su país y la negación de abusos sexuales, concluyendo que existen contradicciones entre lo expresado por la joven y lo señalado en el informe psicológico.