El pasado 29 de agosto, Santander se convirtió en el epicentro de buenas noticias económicas, ya que las cifras del comercio minorista en Cantabria revelaron un incremento notable del 6,1% en julio, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este crecimiento coloca a la región como la segunda con mayor aumento en España, superando la media nacional, que se sitúa en un 4,3%. Además, el empleo en el sector también mostró avances, aumentando un 0,8% en julio, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

A lo largo de los primeros siete meses de 2024, las ventas minoristas en Cantabria continuaron su trayectoria ascendente, con un crecimiento acumulado del 5%, nuevamente superior al promedio nacional del 3,8%. Sin embargo, el empleo en el sector se encuentra en una posición algo más moderada, con un crecimiento interanual del 0,8% en julio, inferior a la media del país, que fue del 2%. Durante los siete primeros meses del año, el empleo en este sector aumentó un 1,2%, siendo nuevamente menor al 1,5% del promedio nacional.

En comparación con los datos mensuales, Cantabria experimentó un crecimiento en el empleo del 3%, frente al incremento del 1,4% observado a nivel estatal. Estas cifras reflejan una recuperación generalizada, ya que, en julio, todas las comunidades autónomas registraron aumentos en sus ventas minoristas. El País Vasco lideró estos avances con un incremento del 6,7%, seguido de Cantabria.

Con respecto al mercado laboral, se reportaron aumentos en el empleo en todas las regiones, destacándose Castilla La Mancha y Navarra, que vieron subidas del 4,6% y 3,2%, respectivamente. A nivel nacional, las ventas del comercio minorista se incrementaron un 4,3% en julio, marcando un crecimiento significativo que ha resultado en 13 meses consecutivos de alzas. Este crecimiento es un espaldarazo para el sector, que sigue consolidándose frente a los desafíos económicos.

Analizando los distintos segmentos del comercio, se observa que las ventas de productos alimenticios crecieron un 4,1% interanual, mientras que otras categorías experimentaron aumentos de entre el 1,8% y el 7%. Además, las estaciones de servicio también reportaron un elevado incremento del 5,1% en comparación con el julio anterior.

En términos de distribución, los canales más beneficiados fueron las grandes cadenas, que crecieron un 6,2%, seguidas por el comercio electrónico con un 5,2%. Este último, en particular, resalta el cambio de hábitos de consumo hacia lo digital. A pesar de las cifras positivas, es importante mencionar que, al ajustar por estacionalidad, las ventas tuvieron un ligero retroceso del 0,4% en julio, rompiendo una racha de crecimiento desde enero.

Desde una perspectiva mensual, se presentó un panorama variado: el comercio electrónico fue el único sector que logró un aumento en sus ventas, mientras que las pequeñas cadenas experimentaron un descenso notable del 1,9%. Dentro de la serie corregida, los productos alimenticios y no alimenticios vieron descensos del 0,1% y 0,3% respectivamente, aunque las estaciones de servicio sufrieron la mayor caída con un retroceso del 2,2%.

En el acumulado del año, el comercio minorista ha disfrutado de un crecimiento promedio del 3,8%, destacando el aumento del 5,9% en las grandes cadenas y un 3,3% en el comercio electrónico. En relación al empleo, se registró un incremento del 2% en julio con respecto al año anterior, aunque este crecimiento fue ligeramente menor al de junio. La buena noticia es que el empleo en este sector ha mantenido un incremento interanual durante 47 meses consecutivos.

Finalmente, respecto a los diversos modelos de distribución, las grandes cadenas y superficies se destacaron en generación de empleo, con incrementos del 3,6% y 2%, respectivamente. El mes de julio concluye con un modesto aumento del 1,4% en la ocupación del sector, resaltando la resiliencia del comercio a pesar de las fluctuaciones en la economía.