La noche del pasado sábado, en Santander, se vivió un tenso episodio cuando la Policía Local arrestó a una mujer de 43 años, identificada como la intermediaria entre un propietario de un inmueble y una plataforma de alquileres, acusada de irrumpir en un hogar de manera ilícita.

El incidente ocurrió alrededor de las 22:10 horas en la calle Fernando de los Ríos, cuando la mujer entró en la vivienda donde se encontraban cinco jóvenes inquilinas de 21 años. Según reportes policiales, su intención era obligar a las chicas a abandonar el lugar y devolver las llaves, afirmando que habían violado su contrato por haber realizado una fiesta la noche anterior, lo que generó quejas vecinales.

Testimonios de las inquilinas indican que la mujer no solo ingresó sin su consentimiento, sino que lo hizo de manera amenazante, incluso llegando a empujar a una de ellas y a asir por el cuello a otra. Este comportamiento provocó la intervención de las autoridades.

Como consecuencia, la Policía ha iniciado el procedimiento legal pertinente contra la detenida por allanamiento de morada, enfatizando la gravedad de la situación y la necesidad de proteger la integridad de los inquilinos en situaciones de desalojo o conflictos de vivienda.