La tensión entre el Gobierno de Cantabria y los sindicatos docentes sigue en aumento a raíz de la reciente decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC). Este tribunal ha decidido suspender de manera cautelar el decreto de servicios mínimos que la Consejería de Educación había establecido para la huelga docente programada para los próximos lunes y martes.

En un auto emitido este viernes, la Sala de lo Contencioso-Administrativo ha atendido la solicitud presentada por Comisiones Obreras, quien argumentó que la obligatoriedad de que los tutores estuvieran presentes en las aulas de Infantil, primero de Primaria y Educación Especial era excesiva. A partir de ahora, los tutores no estarán obligados a asistir a las clases durante la huelga, lo que podría marcar un precedente en la forma en que se organizan estos paros.

A pesar de esta suspensión, el tribunal ha dejado claro que se trata de una medida temporal. La próxima semana, específicamente el lunes a las 9:30 horas, tanto el sindicato como el Gobierno están convocados a presentar sus respectivas alegaciones sobre la cuestión, lo que indica que la controversia podría estar lejos de resolverse.

El auto judicial destaca la importancia de la función del tutor, pero también considera que, dado que la huelga es solo por dos días, esta responsabilidad puede ser asumida por otros docentes que, según el decreto, formarían parte de los servicios mínimos establecidos.

A pesar de la suspensión parcial, el TSJC ha decidido mantener el resto de los servicios mínimos, que incluyen la presencia del equipo directivo y un número ajustado de docentes en función de la matrícula de cada centro educativo. Esta decisión refleja la preocupación del tribunal por garantizar el ejercicio de derechos y valores esenciales, concluyendo que los servicios mínimos no constituyen una restricción desproporcionada al derecho de huelga.