SANTANDER, 1 de octubre. La situación de un hogar en Santander se tornó violenta el pasado martes, cuando un matrimonio junto a su hijo adolescente se vieron envueltos en una acalorada discusión que culminó en una agresión mutua en plena vía pública.

El incidente tuvo lugar alrededor de las 13:40 en la calle Madre Soledad, provocando la intervención de la Policía Local. El hombre, de 49 años, fue arrestado poco después cuando intentaba abandonar el área al conducir un vehículo. Al ser abordado por los agentes, se negó de forma categórica a someterse a la prueba de alcoholemia, lo que generó sospechas sobre su comportamiento.

Como resultado, el individuo fue detenido bajo la acusación de violencia de género por la agresión registrada, así como por dos delitos relacionados con la seguridad vial: la negativa a la prueba de alcoholemia y la conducción bajo los efectos del alcohol. Además, las autoridades se hicieron cargo del automóvil, que fue remolcado al depósito de Ojaiz.

Asimismo, la Policía Local también arrestó a la mujer, de 45 años, y a su hijo de 17, bajo sospecha de cometer delitos de violencia doméstica. Este dantesco episodio pone de relieve la complejidad de las dinámicas familiares que, lamentablemente, pueden derivar en conflictos violentos.

En otro suceso relacionado con la seguridad vial, el mismo martes llevaron a cabo la atención médica de dos mujeres, de 33 y 29 años, quienes resultaron heridas en accidentes de tráfico. La primera colisión ocurrió a las 18:40 en la Avenida de Parayas, donde una de las conductoras fue traslada al hospital Valdecilla tras una colisión por alcance entre dos vehículos.

El segundo accidente se registró poco después, alrededor de las 19:00 en la calle Los Ciruelos, en la zona de Alisal, donde ambas conductoras se vieron implicadas en un choque similar. La conductora de 29 años fue igualmente evacuada en ambulancia a consecuencia de las lesiones sufridas durante la colisión.