En un acto heroico de intervención rápida, dos agentes de la Policía Municipal de Tordesillas salvaron la vida de un hombre de 70 años, residente en Castro Urdiales, quien sufrió un atragantamiento mientras se encontraba en un bar local.

La emergencia se recibió alrededor de las 14:30 horas, cuando la Sala de Emergencias 112 notificó a las autoridades sobre un hombre que se encontraba desmayado en el bar Viky, situado en la Plaza Mayor. Según indicaron fuentes oficiales, la situación requería una respuesta inmediata.

Al llegar al lugar en cuestión, una patrulla de la Policía Local encontró al hombre tendido en el suelo, manifestando signos evidentes de asfixia causados por un trozo de carne que se había quedado atorado en su esófago. La rápida identificación de la gravedad del caso por parte de los policías fue crucial, ya que el oxígeno no podía llegar a sus pulmones.

Frente a un gran número de testigos, los dos agentes no dudaron en aplicar la maniobra de Heimlich en un intento urgente de liberar la vía respiratoria del hombre. Su compromiso y profesionalismo se mantuvieron firmes hasta que una ambulancia de emergencias sanitarias llegó al lugar.

Finalmente, un técnico en emergencias logró extraer el objeto que bloqueaba la tráquea del paciente utilizando un aspirador. Después de recibir estabilidad, el hombre fue trasladado a un centro médico en Valladolid, consciente y agradecido por la rápida acción que le salvó la vida.

El técnico de emergencias, tras la situación, no dudó en reconocer la valiosa intervención de los policías municipales, afirmando que su rápida actuación “transformó una situación extremadamente grave”, enfatizando cómo, sin su ayuda inicial, el desenlace podría haber sido trágico para el afectado por falta de oxígeno.